HOMENAJE

Con tristeza escribo estas líneas. Acabo de conocer la noticia: mi gato, mi gatito querido ha muerto. No contaré aquí frívolos detalles de su muerte, sino que les quiero contar cómo llegó a mi vida. Llegó pequeñito a mi casa, en una época muy distinta. Mi abuelo estaba con vida, yo aún no me iba de casa, y estaba a punto de viajar a Brasil, de vacaciones. Por eso lo bauticé con el nombre de "Garoto". Cuando volví del viaje ya estaba más grande, había crecido mucho en pocos días. Al poco tiempo me fui de casa, a vivir con Carlos, y lo tuve que dejar. Con pena, porque en mi nueva casa era imposible tenerlo. Así fue como quedó en la casa, acompañando a mi familia. Estuvo al lado de mi abuelo, fiel, hasta el día de su muerte; incluso, hasta cuando lo estábamos velando no se movía de su ataúd. Después se encargó de acompañar a mi madre, y vaya que la acompañó... (todos conocen esa relación).

Hoy ha partido y con mucha pena lo digo. Hasta mi mamá lo está extrañado (creo que tendré que regalarle otra mascotita).

Buen viaje mi "garoto", y aprovecha bien las seis vidas que te quedan.